Esa que veis ahí y que ha tenido la poca decencia de pintarse el número con carmín soy yo, Iria, también conocida como La Bibliófila, apelativo que expresa a la perfección mi devoción: los libros.
Leo, escribo e imagino a todas horas y en cualquier lugar. Vivo en la luna, en las nubes, o a donde sea que vayamos cuando nuestra mente echa a volar y el mundo que hay a nuestro alrededor no existe.
Se me puede definir como una persona despistada, torpe, risueña, delirante y dulce. No puedo dejar de omitir que tengo mis días pasotas, y que no son preciamente pocos.
Río mucho más de lo normal y a menudo de mí misma, de mi singular torpeza. Me encanta rodearme de esos amigos que son el motivo de que ría tanto, porque saben hacerme feliz.
Como una cantidad de chocolate impresionante y duermo lo mínimo.
Pero, sin duda, mi afición y veneración principal es leer. En los libros descubro millones de mundos alternativos, personajes maravillosos e historias fantásticas que disfruto como una enana leyendo.
Tengo unas ganas indecibles de leer Hermosas Criaturas, pero, por desgracia, mi interminable lista de lecturas pendientes me lo ha impedido. Espero que pronto pueda tenerlo en mis manos.
No me despido sin dejaros mi blog, Rincón Bibliófilo, el claro motivo del apelativo del que os hablaba al principio.
http://iria-rinconmagico.blogspot.com/
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